jueves, 20 de agosto de 2009
Fiebre
Acobardando las ganas, la delicia llegó al fin.
Tu beso en mi mejilla, plantó una vez más, aquello que hace años, dijimos: "jamás pasaría"
Un dolor, una caricia, un poco de sexo entre la piel y la fiebre derribando el cielo de los dos.
No hubo despedida ni flores en el ayer, hubo lo que hay hoy, un manto inerte de presencia quieta, de llama ardiendo levemente hasta extinguir la mordida de la piel.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Corazón blindado
Tu corazón está blindado (como estuvo siempre) simpatizo, sin embargo, con la idea de —algún día— quebrar la protección absurda de tus can...
-
Tu corazón está blindado (como estuvo siempre) simpatizo, sin embargo, con la idea de —algún día— quebrar la protección absurda de tus can...
-
Con tinta china escribí tu nombre en un banco de plaza. Era una tarde fría de invierno berlinés y, sin temor a reprimendas, tallé tu...
No hay comentarios:
Publicar un comentario