miércoles, 16 de septiembre de 2009
Harta, casi tan harta de vos como de mí, aunque en realidad lo estoy de la imagen patética de nosotros al discutir.
Harta de encontrarme siempre con la misma piedra, las mismas señalizaciones absurdas de mí, cosas inexistentes que prefiero no oír nunca más.
Allí estas, con tus hielos en las venas, sin decir más que amenazas paulatinamente.
Allí estas, y aquí estoy yo, suspirando algún abrazo, pero también con la pena inmensa que me provoca no estar más con vos.
No soy la mujer soñada
No soy un espejo de tu ideal de mujer concentrado en tu madre
No soy.
Puedo mucho, hago lo que puedo y cuando sé que puedo más lo intento, y las veces que puedo, sencillamente no quiero...mi tiempo es corto, cada día se hace más corto...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Corazón blindado
Tu corazón está blindado (como estuvo siempre) simpatizo, sin embargo, con la idea de —algún día— quebrar la protección absurda de tus can...
-
Tu corazón está blindado (como estuvo siempre) simpatizo, sin embargo, con la idea de —algún día— quebrar la protección absurda de tus can...
-
Nunca había entendido la gravedad Hasta que algo atrajo tu cuerpo al mío No discuto que haya ocurrido algo especial Aunque si se bien que...
No digas no aun, siempre hay esperanzas. saludos lucia
ResponderEliminarcomo dijiste en uno de tus textos, hay "imposibles posibles", saludos carmen.
ResponderEliminar