
Mis manos de seda, se acercaban al ventanal para abrigarme con la luna. Era hoy el único alivio de contensión que podía alcanzar
Unos cuantos besos al viento, arrinconados en la pared del olvido, se fueron borrando de a poco en nuestros labios.
Un recuerdo inmóvil, que parece asesinar el destino, se aleja y se acerca rotundamente
.
Lo desnudo de mis ojos se concentra en tu última mirada, y en mi triste corazón que entendió que esa fue la última vez que podría verte entero.
Es doloroso. Fue triste. Fue
Me irritás aún en la distancia, lejos completamente del motivo "del amor", mi euforia es por no entender tu ingratitud, entre tantas cosas que no entiendo de vos.
Irás. Te irás decantando a la orilla del río. Yo mientras tanto, iré en mi barco llena de sonrisas
Estarás esperandome al llegar, extendiendome un abrazo que jamás voy a aceptar.
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