lunes, 28 de diciembre de 2009

Balance II

Cerré la ventana para no ver el sol. Abrí las puertas de mi alma ante algunos ojos.
Crucé los dedos por mi suerte. Lloré por amores que creía haber olvidado.
Jugué conmigo. Me emborraché. Leí algunos libros. Me alegré con algunas noticias y me entristecí con otras.
Compuse canciones mientras me bañaba. Imité la voz de Bunbury y de Sabina mientras me duchaba.
Me miré desnuda en el espejo varias veces. Tuve miedo cuando me robaron. Me desperté llorando. Volví a mi infancia en algunos recuerdos.
Fumé cigarrilos, pensé en mí, me olvidé de mí.
Pelié por causas perdidas (varias). Tuve ganas de trabajar y de dejar todo para siempre.
Amé, lloré, amé y llore.

1 comentario:

  1. no deja de sorprenderme lo hermosa que sos
    beso inmenso
    Martín

    ResponderEliminar

Corazón blindado

 Tu corazón está blindado (como estuvo siempre) simpatizo, sin embargo,  con la idea de —algún día— quebrar la protección absurda de tus can...