
Medio vaso y mil madrugadas al olvido.
Príncipe desteñido de mis sueños, cautivo inmoral e incorruptible.
Dos besos en el cajón y un par de heridas sangrando por lo bajo.
Ruidos y sombras despertándome, yo soñándote y temblando.
No es por vos que busco vivir,
ya mis sueños se fueron en otro barco.
Pero hay momentos en los que me acuesto a pensar,
si no fuiste vos la mejor copa del desierto,
si no fuiste vos el que se olvidó de mis sueños para siempre.
No sé si volverás a buscarme,
pero infinitamente te diré que no.
No se si volveré a mirarte,
pero sé que mis ojos están en otra parte.
Ausencia de vos y busco vivir.
Ausencia de vos y canto para no encontrarte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario