Alguna vez extrañe tu risa.
Alguna vez te posaste sobre mi boca como una abeja en una flor.
Alguna vez me quisiste y te quise, y dejaste que el silencio nos aceptara mudos.
Alguna vez, ya muy lejana, pediste que te acompañe durante la noche y reclamaste mis brazos junto a tu espalda.
Alguna vez, fingiste amor y te creí y fue allí cuando mi corazón se partió en dos.
Algún día intentarás desafiar mi mirada, mis besos y mi piel,
pero el reloj de alguna vez se convirtió hasta nunca y la piel que no es piel y sólo cicatriza con tu presencia, se volverá veneno para tu miel.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Corazón blindado
Tu corazón está blindado (como estuvo siempre) simpatizo, sin embargo, con la idea de —algún día— quebrar la protección absurda de tus can...

-
Con tinta china escribí tu nombre en un banco de plaza. Era una tarde fría de invierno berlinés y, sin temor a reprimendas, tallé tu...
-
Tu corazón está blindado (como estuvo siempre) simpatizo, sin embargo, con la idea de —algún día— quebrar la protección absurda de tus can...
Lo extrañas, lo se.
ResponderEliminarAnónimo: el final de la frase revela mi único sentimiento hacia ese hombre (que aclaro, no es mi ex)
ResponderEliminarSaludos!!
Solo a tu ex tendrias que extrañar? ;)
ResponderEliminarNunca hablé de extrañar...jeje
ResponderEliminar