La bella durmiente avanza, acaricia con sus manos de laurel aquellos viejos retratos de la infancia de sus hijas.
Vuelve una y otra vez sobre los delicados mimos de su mente, vuelve sobre todo, a la extraña sensación de no volver a abrazarlas.
Las niñas, en otra galaxia de tiempo, extrañan esos mimos y esas caricias, aquellas que quizás son ese manto de tranquilidad que tratan de encontrar en todos los rincones.
La madre, sabe que se reencontrarán. No sabe cuando, sólo sabe que volverán a ser de nuevo cuatro en la familia.
La mujer de la foto es mi mamá, Marina Depersia. La foto fue tomada por mi papá en Mar Del Plata, Febrero 2008.
Soy madre hace 16 años y espero con mucha ansiedad que mis hijos piensen asi de mi, un abrazo a la distancia
ResponderEliminarMaria Claudia