
La mente se pierde, el objeto se va hasta llegar al objeto deseado.
El ruido y el eco que provoca el sonido advierte que algo ha sucedido, quizás cambiado para siempre.
Contemplar el mar o el río son habitos que desearía tener con regularidad pero no vivo a la costa de ninguna orilla aún. Mirar largo rato el agua, sin pensar en nada más que los objetivos que nos replanteamos, en redireccionar la nave en el sentido deseado o simplemente reafirmar la estadía donde nos encontramos.
Como sea, para lo que sea: el mar o el río relajan.
* La foto fué sacada por mí hace unas horas en el río Uruguay en Federación, Entre Ríos.
buena comparativa
ResponderEliminarcariños
Marcos
Todo genera algo...
ResponderEliminarextraño nuestras charlas reflexivas sobre esto o aquello, el caudal de ideas que permanentemente teniamos. No solo era cama como decis...
"fuimos mucho mas que nada"
Sigue siendo nuestra cancion reyes de la noche...
besos
m...
Gracias Marcos. Creo que termina siendo una buena metáfora, si.
ResponderEliminarSaludos