jueves, 31 de enero de 2019

Magenta de amor




“Alguien a quien una vez amé me dio una caja llena de oscuridad. / Me llevó años entender que esto, también, era un regalo’’ (Mary Oliver)

En tu poesía hay un calvario aterciopelado
besos de miel, flores secas en un jarrón y la biblioteca repleta de historias por contarnos,
hay, también, sabor a canela en tus manos y anís en tus mejillas,
hay tanto deseo oculto que nací para contarlo en estas líneas,

Vagamos por las calles estrechas y extrañas,
tememos el mismo cielo color magenta pastel,
acariciamos la tormenta que empieza a desprenderse,
la mía en Berlín, la tuya en Buenos Aires,
y nos volvemos invisibles ante los ojos del mundo,
ante los ojos de quién, como nosotros, no tiene respuestas.

Tus besos me devuelven el amor,
y las ganas.
Tal vez la mejor sonoridad que exista encapsulada en el silencio,
tal vez la mejor porción de mí,
pero estás lejos,
estamos a 11902 kilómetros de nuestros besos
¿Qué pasará con el tiempo sin el tiempo de nosotros?

En mis ojos un diluvio se lee a millas,
pero de nuevo, allí estoy: siendo irreverente en el deseo de endulzar mis manos con tu fuego,
y que lo dicho, entonces, se conciba con la mirada.

Angie Pagnotta

#poemasdeamor

6 comentarios:

  1. Tu poema se ve, romántica Angie, se concibe con la mirada. Los buenos poemas se ven y son siempre románticos.

    Abrazos.

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    1. ¡Qué lindo! Gracias Carlos, creo que es así como decís, creo que se ven más allá de cómo los miremos...¡Abrazote!

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  2. "En mis ojos un diluvio se lee a millas". Muy bello, como todo el poema.
    Abrazo

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    1. Muchísimas gracias, Horacio. Me alegra siempre saber que lo escrito te gusta. Abrazo.

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  3. Un placer llegar hasta aquí, creo que es la primera vez que comento. Me gusta lo que dices y como lo dices... Te dejo mis saludos y espero leerte pronto.
    Y para Carlos, un abrazo. :)

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    1. Hola Laura, bienvenida y muchísimas gracias por tus palabras. Que bueno irnos encontrando. Un abrazo grande.

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