
No es para nada fácil vivir suponiendo.
Creer que el otro tiene la razón, ni adjudicarnos victorias al azar, sólo por que si.
Es fácil en cambio ver en otros la avaricia y la inequidad propia de los que castigan el alma con zapatos y camisas de todos los colores.
¿Está dentro del común de la gente enmudecer? ¿Habrá que abrirle los ojos a medio mundo para despertar? ¿Tendré que ser yo la que intente sacar adelante el desierto de gente que me acompaña?
Y querer siempre, todo el tiempo, llegar hasta la flor, olerla y dejarla ir.
Y esperar que la flor vuelva a mí y ya no tener olfato para entenderla.
Y siempre la misma rueda, yo en un extremo y tu corazón en el otro, como la distancia, como el tiempo que nos pusimos en el medio, como entender que hace infinitos días no te veo y mi ansiedad debe encontrar la calma hasta que te vuelva a abrazar.
Astor de fondo, libertango. Libertad de seguir el viaje del mar y perderme con las olas como Alfonsina.
Muy erotico y a la vez muy atractivo.saludos
ResponderEliminarGerman
Angie, nose como llegue a este sitio pero realmente fue exacto el momento en el que haya leido lo que escribiste para poder entenderlo de esta manera tan precisa. Muy profundo el sentimiento y la descripcion de tal, que genero en mi un alivio y una compañia a cierta soledad que en este momento me abraza...
ResponderEliminarMe gustaria generar algun contacto para seguir leyendo tus publicaciones, que aunque nostalgicas sean, se perciben aun con mas belleza!. Algo similar a las composiciones de Piazzola, que cuanto mas melancolicas, mas preciosas...
Nahuel Paredes
Nahuel, muchas gracias por tu comentario y por haber llegado al blog.
ResponderEliminarTe paso mi contacto de mail: angie_pagnotta@hotmail.com y mi facebook: https://www.facebook.com/motivar.elrelato?fref=ts
Un beso y gracias. Enorme comparación con Piazzolla, gracias.