lunes, 8 de noviembre de 2010

Viento


La lluvia enmudece los teléfonos. Los lazos del corazón se desarman.
La lluvia empaña el deseo y lo abre de nuevo para jugar.
Aquel arbol adelanta unas gotas. Los techos empiezan a mojarse.
El viento expande su risa por el cielo y las hojas reman hacia el mar.

3 comentarios:

  1. ...y las hojas reman hacia el mar, y uno de se deja llevar, en esa barca imaginaria, en el que la deriva es la mejor certeza.

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  2. La lluvia enmudece los teléfonos

    eso es bellisimo

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  3. La lluvia enmudece los teléfonos

    qué bello es eso!

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